
Me di cuenta de que toda la cuestión del asedio a los músicos venía porque me interesaba la música y admiraba a quienes la hacían. Sin prejuicios ni críticas, simplemente era un enajenamiento sano que me producía el artista. Me despertaba sensaciones que yo misma no podía complacer. Pero anoche venía de una conferencia de prensa en la que me crucé con varios músicos y no me animé a encararlos como sí lo hacía Penny Lane. Sentí vergüenza porque me vi parada en otro lugar y me di cuenta que todo lo que quería era información y que podía obtenerla algún día por medios más nobles. Así es que Penny Lane cumplió la mayoría de edad.
Igualmente soy de las que piensan “nunca digas nunca”, por eso tal vez alguna noche me surja la necesidad inevitable de algún camarín, y este no sea un adiós auténtico, sino un hasta luego. Y medio mentiroso, como suelo ser yo.
Bonus track: La Groupie es una columna q escribo en www.elsilenciorock.com.ar y Penny Lane es quien cuenta, entre ficción y realidad, los encuentros furtivos con algunos músicos.
Comentarios
Ese adiós no suena para nada a Adiós.
Re suena a "Hasta luego"
Vaaaaaaaaaamos, q una trola tan fácil no puede dejar de serlo.
Oia.
Besotes!!
ross: eso es cierto también!
verdu: eso hago!! ;D beso!
Besos!!!
apo: si, claro, me aprovecho de esa puerta abierta y de no decir nunca "nunca". besos!!
Y ahora me explicás con fin estoy yendo a clases de guitarra y poniendo avisos de "se busca primera guitarra, batero, bajista y voz lider para banda onda Led Zep"
Besotes =P
y despues me di cuenta de q es facho, grasa, y deforme
A