Vos

Te miro y me dan ganas de llorar

porque tengo siempre tanto miedo,

porque siempre necesito más,

porque soy caprichosa

y me excedo en el pedido.

Te miro, entiendo.

Me llamo caprichosa

por no saberme

capaz de recibir tanto.

Me lo estás dando todo

y yo, nena boba, no sé bailar.