Sacá la llave

"Hoy estoy especialmente sexual", dice una parte mía. Yo le creo. Es que parece domingo y quiero dedos y cuerpos. Y pasar todo el domingo en la cama. De a ratos dormir y volver a despertar, y seguir, más dedos y todas las piernas de la cama son nuestras. Qué suaves que somos.

Pero eso no importa tanto como este cuaderno violeta que se está terminando, porque yo, como con la pasta de dientes, nunca uso los cuadernos hasta el final. Pero creo que esta vez será distinto. Quiero que empiece y termine. Quiero empezar y terminar.

Sé que hoy no tendré nada de sexo, por mucho que lo desee. A lo sumo, autosexo, y ver una película, otra, no porno, fingiendo que es domingo, y la edición de una nota una vez que haya descansado. Estoy escuchando Sumo y después veo a Gabo con mis amigos. ¿Ves que estar sola no está tan mal? Aunque tal vez a la noche te avise, no dejes la llave puesta, y repte hasta tu cama y de esta forma la maldición del no sexo se revierta.