Siesta

La hora de la siesta es el mejor momento para estar conmigo, pensar en él y recordar algún momento. Cerrar los ojos, recordarlo, pensar en algo más, en alguien más, alguna chica. La respiración se acentúa, mis dedos se hinchan y se pierden en un túnel viscoso. Los ojos cerrados. Yo, él, vos, ella, yo. Otro recuerdo, otra imagen y la electricidad. Me quedo un instante, siento cómo late mi cuerpo y vuelvo a mí. Es el fin hasta la próxima siesta.