La ciudad, la hermosa ciudad

Recién venía caminando por la calle. Bueno, por la vereda, se entiende. Estaba yendo a lo de un amigo, y como recién me mudé, no la tengo muy clara con el tema de las calles y todo eso. Entonces venía así, calculando cuando cruzaba, viendo los semáforos cambiar de color y tratando de sacarle la ficha a esas cinco esquinas repletas de diagonales. La casa de mi amigo queda a mitad de cuadra y yo no sabía si cruzar en la esquina o más adelante, así caía justo en la puerta de su edificio. Ya sé que está mal y que hay que cruzar por las sendas peatonales, es que yo soy un desastre con las calles. En el medio de mi dilema existencial veo a un pibe en el semáforo que se baja de un auto y me mira, me mira, me mira. “¿Qué le pasa a éste?”, pensé, “está loco”. Pero seguí con lo mío que me preocupaba más. Enseguida se fue de mi cabeza ese auto rojo y el pibe con campera del mismo color. Pero en cuestión de segundos una bocina me hizo recordarlo nuevamente cuando pasó, sacó la cabeza por la ventanilla y me sonrió. Me hizo el gesto de “esperá” con la mano y ahí lo reconocí. Estacionó en la esquina, se bajó y cruzó la calle todavía sonriendo. Nos vimos, nos abrazamos y me dijo que le habían dicho que me estaba por casar. Siempre me dice lo mismo para saber si estoy de novia o qué, como tanteando la cuestión. “Me acabo de separar”, le dije y casi me pongo a llorar. Entonces me abrazó y me dijo “Julita, Julita, sos tan linda, por fuera y por dentro, tan linda, no estés triste”, y me hizo sentir un cronopio encantador. Le dije que bueno, que ya se me iba a pasar, y nos pusimos a hablar de nuestros trabajos. Él es manager de dos músicos importantes (de rock, claro) y tuvimos también una historia importante hace unos años. A ver... hace unos cuantos años, entre cuatro y cinco, tuvimos muchas idas y venidas. Así que hablamos un poco de nosotros y nos pareció bien que nuestros trabajos se cruzaran alguna vez. Él me contó alguna cosa más y quedamos en encontrarnos en el Bob Marley Day Festival, porque él es el organizador y casi se muere cuando le pregunté cuándo y dónde. Claro, es que yo siempre estaba al tanto de todas sus fechas y demás cosas e iba a todos los lugares que sabía que él iba a estar.

Espero recordar el Bob Marley Day Festival.