Se presenta la carta
del mazo
la más mansa, la que navega
y dice:
estás a tiempo y
espacio
de flotar, ya estás en
las aguas de la vida.
Dice eso y también
que la visión del
águila ya es confianza
y la relajación se
escribe con rocío
y la humedad augura
que todo está
sucediendo.
La carta pide no
ambicionar
para no perder lo que
no se tiene,
busco lo inferior como
el agua
que se desplaza hacia
lo profundo
como el camino
acuático del Tao
que va hacia lo más
bajo
y busca un terreno
invisible
sin dormirse ni
apagarse,
hasta ser una no
entidad.
El camino del Tao es
el del arroyo
allí hay movimiento
¿Cómo se mueve un río?
No hace nada mágico,
nada santo,
sólo se desplaza hacia
abajo
su destreza es la pasividad.
No soy única,
excepcional ni extraordinaria
soy un algo que se
entrega sin ilusiones
las expectativas son
para quienes desean.
Comentarios